Detectar enfermedades de transmisióon sexual en el embarazo
| Enfermedades de transmisión sexual | Carmen Rodríguez
No se realizan los suficientes análisis de sangre en el embarazo para detectar ETS
En Estados Unidos, no llega al 60% el caso de mujeres a las que se realiza un análisis de sangre durante el embarazo para detectar gonorrea o clamidia, enfermedad de transmisión sexual (ETS) que se puede transmitir al bebé.
Y eso que, según datos facilitados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés), cada año alrededor de 100.000 embarazadas en ese país desarrollan la infección por clamidia y más de 13.000 poseen gonorrea, esta última con un alto riesgo para las menores de 25 años y mujeres que viven en zonas donde la infección en más común.
No obstante, los médicos aseguran que ambas enfermedades de transmisión sexual son fáciles de diagnosticar, tratar y curar, pero es necesaria una detección a tiempo, puesto que podrían transmitirse al bebé y causar enfermedades pélvicas inflamatorias con probabilidad de derivar en infertilidad o embarazo ectópico (óvulo fertilizado fuera del útero).
Ante esta situación, muchos médicos reivindican que, a pesar de que se recomienda la realización de estas pruebas, en múltiples casos no se llevan a cabo. Por lo que aconsejan a mujeres embarazadas hablar con sus médicos para que les realicen esos test de detección de posibles ETS que podrían complicar el embarazo y el desarrollo normal del feto. Asimismo, se recomienda practicar otros test para detectar sífilis y VIH en el embarazo.