Millones de mujeres sin salud sexual
| Salud sexual | Carmen Rodríguez
Naciones Unidas recomienda a los estados que velen por los derechos sexuales y reproductivos
ACNUDH (Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos) ha manifestado que el derecho a la salud sexual y reproductiva está ligado a otros derechos humanos. Insistió en su relación con la igualdad de género, el trabajo, la educación, la autonomía personal, la privacidad y, por supuesto, la protección contra la tortura. “La salud sexual sigue siendo un objetivo lejano para millones de personas, especialmente para las mujeres y las niñas”, afirmaron con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Heisoo Shin, miembro del CDESC (el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas) denunció el alto índice de mortalidad materna en el mundo, la mutilación genital y el matrimonio infantil. “Los Gobiernos no han asignado suficiente atención y recursos para combatir la mortalidad materna. En 2016, no debería verse a las mujeres morir a consecuencia del parto, debido a la insuficiencia de las instalaciones, o por falta de atención o porque son pobres”, manifestó. También afirmó que los estereotipos de género y la desigualdad juegan un papel importante fomentando las violaciones de los derechos humanos y de la salud sexual.
18 miembros independientes del CDESC han adoptado la Observación general número 22, que además de reconocer estas y otras violaciones de los derechos sexuales y reproductivos (como la violencia obstétrica y la negación del aborto) incluye buenas prácticas para el acceso a servicios de salud sexual. Dicha Observación insta a los Estados a derogar normas que obstaculicen la salud, así como al acceso a la educación sexual basada en la evidencia científica. Asimismo, recoge el deber de los países de garantizar el acceso al aborto seguro, al tratamiento de la infertilidad, del cáncer del aparato reproductor y de las enfermedades de transmisión sexual como el VIH/SIDA.
Informe de la Organización Mundial de la Salud
La desatención de la salud sexual y reproductiva perjudica principalmente a las mujeres, en mayor medida en las zonas más empobrecidas. Esta fue la conclusión a la que llegó el informe “Las mujeres y la salud, los datos de hoy, la agenda de mañana”, de la OMS. Según dicha investigación, la mitad de las mujeres en el mundo sufren un acceso desigual a los servicios de atención primaria. La sociedad médica no presta la atención adecuada a las mujeres, especialmente en las fases de adolescencia y la vejez. Aunque las mujeres viven más años que los hombres, tanto el nivel de salud como la autopercepción sobre la misma es más negativa; además presentan un mayor número de trastornos crónicos. Hay factores de morbilidad asociados al sexo biológico (como el embarazo y el parto), pero la mayoría son consecuencia del rol de género femenino. En países en vías de desarrollo, las mujeres en edad sexual y reproductiva peligran por el menor uso de métodos anticonceptivos, la mortalidad materna, la falta de acceso a la interrupción legal del embarazo, la incidencia del VIH/SIDA, etc. En cualquier caso, los riesgos deben tener una asistencia específica.
En cuanto a bienestar psicológico, la OMS apunta al suicidio como una de las principales causas de mortalidad entre mujeres de 20 a 59 años. También ha relacionado los trastornos mentales y la depresión con la discriminación social, legal y económica o la violencia de género sufrida. La masculinidad tradicional también se asocia a hábitos insalubres.