El Molusco Contagioso no es exclusivamente una ETS o Enfermedad de Transmisión Sexual, ya que se puede contraer por otros medios ya que puede ser mediante contacto directo con alguien que esté afectado o con el simple hecho de compartir ropa o toallas.
Se trata de una infección de la piel que se manifiesta en forma de pequeñas perlas tipo verrugas, es decir, moluscos, que se presentan en tono rosado o color carne, algunos de los cuales presentan una hendidura en el centro.
Por lo general no son dolorosos pero sí pueden presentar picazón, inflamarse o infectarse, sobre todo si se rascan, algo que favorece además su diseminación y posible contagio a otras partes del cuerpo.
Entre los diferentes tratamientos que te pueden recomendar para tratar el Molusco Contagioso está la extracción del cuerpo del Molusco; la crioterapia mediante nitrógeno líquido de forma que se eliminen las lesiones; el curetaje para eliminar el tejido; láser, aunque es un tratamiento caro; o los inmunomoduladores de aplicación en casa, entre otros.
No obstante, y puesto que a veces estos tratamientos pueden ser dolorosos, en ocasiones los médicos dejan que el molusco contagioso desaparezca sin ningún tipo de tratamiento, de forma que el molusco se puede eliminar en 2 o 3 meses, aunque hay veces que aparecen nuevos moluscos cuando otros desaparecen.
Los expertos señalan, por tanto, que suelen transcurrir entre 6 y 18 meses (o incluso más) hasta la completa desaparición del molusco contagioso. Es importante además iniciar el tratamiento de manera temprana, al inicio de la formación de los tumores o moluscos, pero no intentes quitarte tú los moluscos, acude siempre a un médico especialista que pueda diagnosticar que efectivamente tienes moluscos contagiosos y, en caso de poner en marcha un tratamiento, te dirá cuál seguirás y toda la información sobre posibles molestias y dolores.
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