Escabiosis

La escabiosis (sarna) es una enfermedad muy común, que no es en exclusivamente del grupo de las enfermedades de transmisión sexual, pero que sí existe un contagio de esta enfermedad por medio de una persona a otra por el contacto físico.

¿Qué es la escabiosis?

La escabiosis no está dentro del grupo exclusivo de las enfermedades de transmisión sexual, es decir, no se contagia solo por medio de las relaciones sexuales. Esta es una enfermedad de la piel causada por el ácaro Sarcoptes Scabei, que pertenece a la familia de las arañas.

Este ácaro excava bajo la piel donde hace pequeños agujeros para depositar sus huevos que tienen un periodo de incubación de entre 6 y 8 semanas.

¿Cómo se contagia la sarna?

La sarna se contagia por el contacto directo de piel a piel. Ocurre usualmente durante el sexo, especialmente cuando los cuerpos están cerca o en contacto durante un tiempo prolongado.

La mayoría de las personas se contagian durante las relaciones sexuales, pero también se puede contagiar por otras vías como son:

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  En momentos donde existe contacto directo en lugares concurridos como asilos, prisiones y guarderías.
• Por compartir ropa, toallas o sábanas con una persona infectada.

Es difícil contagiarse por un contacto rápido y casual. Tampoco te contagias por sentarte en un inodoro. Se necesita un contacto personal muy cercano con alguien infectado para que se transmita.

Síntomas de la escabiosis

Aparecen entre las 3 y 6 semanas después de su contagio. Los síntomas iniciales son:

• Picor: síntoma principal y más conocido. El ácaro, inicialmente, no causa picor, pero cuando invade la piel nuestro cuerpo se sensibiliza y se defiende mediante la reacción alérgica.
• Lesiones primarias: lo más frecuente es encontrar en la piel surcos finos de color grisáceo. El ácaro invade la zona de la piel con poco pelo, las zonas más frecuentes son antebrazos, muñecas y entre los dedos de la mano.
• Lesiones secundarias: alteraciones de la piel por tener la sarna. Las más importantes son:
  • Vesículas: bultos llenos de líquido que se forman por la alergia de nuestro cuerpo hacia el parásito. Aparecen en glúteos, muslos y alrededor del ombligo.
  • Nódulos rojizos: se encuentran en ingles, axilas y espalda. En ocasiones hace falta extirparlos con cirugía.
  • Engrosamiento de la piel (liquenificación): cuando te rascas mucho, la piel se defiende volviéndose más gruesa. Cuando dejes de rascarte la piel vuelve a su estado normal.
  • Heridas: el rascado provocar heridas en la piel. Las bacterias pueden provocar infecciones como el impétigo, la celulitis, la foliculitis, etc.

Diagnóstico de la sarna

Para diagnosticar de manera correcta, es necesario realizar un examen que consiste en un raspado de la piel afectada y observarlo bajo el microscopio. En otros casos, se necesita de una biopsia de la piel.

Tratamiento de la sarna

El tratamiento es con fármacos, a no ser que la infección no sea muy extensa, en este caso se puede tratar con una pomada específica.

Antes de iniciar el tratamiento para curar la infección es aconsejable que se lave toda la ropa interior, pijamas y toallas en agua caliente, aspirar las alfombras y aquellos muebles tapizados como pueden ser sillas o sofás, etc.

Si se ha tenido contacto cercano con otras personas, estas deberían realizarse un examen también, con la finalidad de evitar una infección.

Complicaciones de la escabiosis

Rascarse de manera brusca y fuerte la piel puede hacer que se rompa y producir una infección bacteriana secundaria, como el impétigo (infección superficial de la piel).

Una forma más grave de escabiosis es la llamada sarna con costra (o sarna costrosa, o escabiosis Noruega) que afecta a:

• Personas con debilidad en el sistema inmunitario, como el VIH o leucemia crónica
• Personas muy enfermas, como las que están en hospitales o residencias para ancianos.
• Personas mayores en casas de reposo.

La escabiosis Noruega tiene una apariencia seca y escamosa y a afecta a zonas extensas del cuerpo. Es muy contagiosa y difícil de tratar.

Prevenir la escabiosis

No porque la sarna se propaga rápida y fácilmente, por lo que no hay forma de protegerse. Lo único que puede disminuir las probabilidades es reducir la cantidad de personas con las que se tiene contacto sexual o íntimo.
Si tienes sarna, no vuelvas a tener relaciones sexuales hasta que tu pareja haya completado el tratamiento.

Información detallada

• Parte del cuerpo afectada: Pies, manos, codos, nalgas, alrededor del pecho, ombligo y genitales.
• Causas: Ácaro Sarcoptes Scabei.
• Medicación utilizada: Fármacos y pomadas específicas.
• Complicaciones: Entrar bacterias en la zona de piel infectada y originar otras infecciones.
• Tratamientos: Fármacos y pomadas específicas.
• Prevención: Evitar el contacto con la gente infectada.
• Factores de riesgo: Tener relaciones sexuales con alguien infectado o tener contacto directo no sexual con alguien infectado.
• Síntomas: Picor, lesiones primarias y lesiones secundarias.
• Terapia preventiva: No vacuna para prevenir la Escabiosis.

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