Problemas sexuales
Te ofrecemos información sobre los problemas sexuales. Conoce cuáles son y las causas que afectan a los problemas sexuales, como los biológicos y psicosociales, a fin de tener una sexualidad libre y sana.
¿Qué son los problemas sexuales?
Los problemas sexuales son diversas circunstancias que afectan a nuestras relaciones sexuales. Las disfunciones sexuales pueden llegar a afectar a nuestra salud y a nuestra vida diaria. Las causas pueden ser de tipo orgánico, psicológico, social o cultural.
Problemas sexuales biológicos
Cuando nuestra sexualidad, tanto en solitario como con otras personas, se ve afectada de modo recurrente, a menudo la causa puede ser fisiológica, biológica.
Las causas de origen biológico más habituales suelen ser el consumo de alguna medicación nueva, la aparición de alguna enfermedad, la diabetes, el colesterol (estos dos últimos sobre todo en los hombres), trastornos hormonales y, por supuesto, una alimentación inadecuada, la falta de deporte y el tabaquismo. La edad también puede influir en los problemas de insatisfacción con el tiempo de eyaculación (eyaculación precoz) y de erección.
Problemas sexuales de psicosociales
En otros casos, los problemas sexuales se deben a factores psicológicos y socio-culturales. La ansiedad, la depresión y el estrés afectan a las relaciones sexuales.
En las disfunciones de falta de deseo, suele ser un caso muy común que exista algún problema de pareja, especialmente si se trata de un trastorno secundario o deseo sexual de tipo II (antes las prácticas sexuales no presentaban ninguna problemática o eran más habituales). En estas circunstancias, se recomienda acudir a terapia sexual o terapia de pareja.
Cuando existen casos de anorgasmia, descartadas otras disfunciones como el vaginismo o la dispareunia (esta última sí de carácter biológico), también pueden estar influyéndonos mensajes socio-culturales. Aunque dichos mensajes son muy diferentes en función del género, tienen en común que nos presionan con supuestas maneras de practicar la sexualidad según seamos hombres o mujeres. Por eso se originan problemas sexuales masculinos y problemas sexuales en la mujer.
Aunque siempre debemos usar métodos anticonceptivos y preservativo para protegernos de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual, el miedo excesivo a estos factores también puede influirnos para no dejarnos llevar.
Por último, no podemos olvidarnos que la violencia de género, pueden estar detrás de la falta de deseo expresada por muchas mujeres.